Y es algo que puede resultar contradictorio, considerando la prohibición del uso del celular en niños y adolescentes hasta hace no mucho tiempo. El uso del celular estaba directamente relacionado con la distracción, por lo que estar usando el teléfono en clase era, incluso, motivo de suspensión en algunos casos.

El smartphone como herramienta integradora

La necesidad de encontrar medios para la integración de los grupos de estudiantes existió siempre. Conformar grupos unidos y colaborativos es una tarea bastante ardua y, algunas veces, bastante difícil, pero, la ayuda del smartphone en este aspecto puede ser fundamental. Al ser un medio en común entre estudiantes, los teléfonos logran funcionar como nexo entre ellos a la hora de trabajar en equipo, comunicarse y ayudarse en el aporte de ideas.

Más y mejor comunicación alumno/docente

La comunicación entre alumnos y docentes es un aspecto fundamental para los dos; facilita la proximidad de maestros, colaborando en la comprensión de las necesidades de cada alumno, y genera mucha más confianza y apertura de parte de los chicos. Los teléfonos como un Samsung serie A dan la posibilidad de estar mucho más comunicados entre todos y así lograr un mejor desempeño de ambas partes.

¿Qué smartphones se recomiendan para estudiantes?

La oferta es amplia y variada; en el mercado podemos encontrar teléfonos de gama alta o media que pueden ser igual de útiles. Considerando los fines y el tiempo de uso que se le va a dar al smartphone, podemos decir que uno de gama media como un Samsung A52 de funciona perfecto para este fin.

Un cambio de paradigma

Los tiempos cambian; las nuevas generaciones nacieron y crecieron con celulares y tablets. Esta relación que tienen los jóvenes con la tecnología dio paso, inevitablemente, a la implementación de estos dispositivos para uso educativo. La pandemia también hizo de las suyas para contribuir a esto, acelerando aún más la adaptación de docentes y padres a estos medios.

A continuación, vamos a dar un pantallazo a los aspectos más fuertes del uso del smartphone en los procesos educativos.

Incremento en la motivación

No hay dudas de que uno de los puntos principales es la motivación que puede generar el celular aplicado al estudio. Los jóvenes tienen una tendencia incorporada desde su infancia al uso del smartphone para casi todo. Por esto resulta totalmente beneficioso integrarlo a la rutina estudiantil; dar un medio tan familiar para ellos facilita la aceptación y la asimilación de contenidos educativos.

Accesibilidad y portabilidad

Otro punto a favor es la posibilidad de llevar la tarea, trabajos prácticos y textos a todos lados. Los estudiantes tienen la posibilidad de ponerse al día desde donde estén, incluso si por algún motivo tienen que faltar a la escuela. Esto también brinda a los docentes la posibilidad de facilitar al alumno la clase de forma rápida.

Mayor inclusión

El acceso a una PC y WIFI en los hogares no es un recurso disponible para todos los alumnos por igual. En muchos casos, el acceso a una buena conexión resulta casi imposible, perjudicando y poniendo trabas al aprendizaje. Es poco usual que si usamos un smartphone no tengamos datos, básicamente porque los usamos para todo. Por esto, los celulares colaboran en achicar esta brecha digital. Incluso facilita el acceso a libros y material gratuito.

Fácil acceso a libros y material complementario

En la actualidad podemos encontrar una vasta cantidad de libros, textos, incluso contenido audiovisual que contribuyen al aprendizaje. La enseñanza ya no se limita solo a un libro físico, sino, a una infinita cantidad de recursos disponibles en muchos sitios de internet.

Aumento en la curiosidad y la investigación

El acceso ilimitado a estos contenidos online fomentan las ganas de saber más, y la facilidad para hacerlo da paso a un aprendizaje autónomo. Además, a diferencia del material impreso, que si no se renueva cada año puede quedar estancado, la información actualizada para una mejor investigación está cien por ciento asegurada.

Contenido disponible en todo momento

Hace algunos años, el hecho de tener que asimilar todo el contenido de una clase en las horas de cursada podía resultar muy frustrante en algunos casos. Teniendo en cuenta el hecho de que cada estudiante tiene su tiempo de concentración, el aprendizaje no es igual para todos, lo que derivó en la necesidad de adaptar la manera de enseñar. La llegada del smartphone al ámbito educativo rompió con este obstáculo para que cada estudiante pueda acceder a lo visto en clase en el momento que lo necesite.

Aprendizaje lúdico

Otro factor al que se le comenzó a prestar mayor atención con el tiempo es a la necesidad de recurrir al juego en el proceso de enseñanza. Sabemos que, sobre todo para el nivel inicial, conjugar el estudio con lo lúdico puede resultar muy productivo para captar el interés del alumno. Los smartphones nos dan la posibilidad de acceder a aplicaciones que combinan contenido y juegos y que pueden ser súper útiles para incorporar en las clases.

Alternativas para el aprendizaje

Las aplicaciones disponibles en los smartphones también ayudan a fomentar la comprensión de distintas materias. Existen apps totalmente orientadas a las distintas disciplinas con material audiovisual, ejemplos y cuadros que pueden resultar muchas veces necesarios para que el alumno logre comprender lo que se ve en clase.

Estudio personalizado

Además del enriquecimiento educativo que ofrecen las aplicaciones, tenemos que destacar también el hecho de que muchas aplicaciones ofrecen la posibilidad de personalizar la manera en la que se brinda el contenido, así cada alumno puede adaptarlo a su forma de aprender y a sus necesidades.

La educación y el futuro

En un mundo que se encuentra en un cambio constante, adaptar tanto el material de estudio como la manera de enseñar necesitan adaptarse para las nuevas generaciones. Los medios están al alcance de todos.